Mucho os hemos hablado de nuestra carnicería o de los embutidos típicos por no hablar de las numerosas recetas que os hemos ido dejando en nuestro blog, pero hoy queremos ir un poco más lejos y contaros algo acerca del lugar donde nos encontramos.

 

Nuestra ubicación no es casual ya que nuestros antepasados montaron la primera carnicería en la primera zona comercial de Salamanca, y aquí nos mantenemos desde entonces.

El Mercado Central de Salamanca, es el mercado de abastos de la ciudad por excelencia, el más bonito, el que ofrece los mejores productos y el más antiguo.

 

Junto a la Plaza Mayor el arquitecto Joaquín de Vargas diseñó esta obra de arte hace más de un siglo y hoy sigue siendo lugar de referencia en la vida cotidiana de los salmantinos.

 

LA IDEA.

 

La idea de construir este Mercado Central surgió ante la necesidad de agrupar los diferentes comercios de la ciudad en una zona donde los comerciantes se pudieran resguardar de las inclemencias meteorológicas, y los ciudadanos   poder comprar las viandas necesarias para los hogares salmantinos, facilitando así la vida cotidiana de todos.

 

Hoy, en la Plaza del Mercado, llamada antiguamente Plaza de la Verdura, sigue cumpliendo este objetivo para el que fue diseñado.

 

DISEÑO Y CONSTRUCCIÓN.

 

El proyecto comenzó en 1899, con el encargo del mismo al arquitecto Don Joaquín de Vargas, pero no se concluyó su construcción hasta 11 años después, principalmente por temas de presupuesto.

 

En 1909 por fin vio la luz el mercado completo y se inauguró ante la mirada de cientos de salmantinos que quisieron participar en un hito para la ciudad, pues suponía una modernización tanto de la zona como del comercio salmantino.

 

Los vecinos de la zona rápidamente comprendieron que ahora tenían un lugar limpio y moderno donde adquirir sus viandas. Además podían conocer los precios de los productos con anterioridad a comprarlos.

 

PECULIARIDADES DEL MERCADO.

Este mercado fue pensado y diseñado minuciosamente para conseguir que con una arquitectura sencilla y vanguardista la ventilación fuese permanente, consiguiendo así una mayor salubridad en los productos de consumo.

 

También se consiguieron cubiertas que preservaban, tanto a vendedores y clientes, como a los productos a la venta, de los fuertes calores de verano y los fríos del invierno, y agua potable ilimitada y de calidad aportada desde la red de suministro del propio mercado.

 

EL MERCADO EN LA ACTUALIDAD.

 

En la actualidad, más de 100 años después de su inauguración, sigue cumpliendo a la perfección su función de centro de compras, además de aportar belleza y valor arquitectónico a la ciudad.

 

El Mercado Central de Abastos de Salamanca pone a disposición del visitante todo tipo de productos frescos, así como todos los productos con D.O de la provincia de Salamanca, en las dos plantas en que se divide. En la primera planta nos encontramos con dos anillos concéntricos de tiendas.

 

En la parte exterior hay tiendas de todo tipo, pero principalmente establecimientos con una amplia selección de productos avícolas y conejos, mariscos (tanto frescos como congelados), pescaderías, carnicerías y salchicherías. En esta parte también podemos encontrar panaderías con horno propio, en las que podemos adquirir pan, bollos o pasteles.

 

En el anillo central están situadas las fruterías (con amplios surtidos en frutas, verduras, hortalizas), y una tienda de regalos; así mismo esta parte central posee unos bancos en los que descansar de una ajetreada mañana de compras.

 

En la planta inferior también hay carnicerías en las que podemos encontrar tiendas especializadas en casquería, aves, caza, tostones, cabritos, lechazos y productos avícolas. Como en todo mercado, aquí también existe un ultramarinos, una tienda de encurtidos, una tienda de café, lozas y cerámicas y una cafetería.

 

Este artículo es un resumen muy breve de nuestro precioso mercado. Si deseáis saber más cerca de él, en la web encontraréis amplios estudios sobre su historia y su arquitectura.