MANILLAS DE CERDO GUISADAS.

Fieles a nuestra idea de enseñaros los secretos del oficio de la carne, y la infinidad de maneras que hay de consumirla, hoy os proponemos de nuevo una receta, pero esta vez no es la típica receta de carne de cerdo sin más.

Os atrevéis a cocinar los lomos, el solomillo, la jeta, los embutidos… pero… ¿ sabríais cocinar un autentico manjar como son las manillas? Hoy os enseñamos.

Es un plato de elaboración fácil, si bien es necesario tomarnos nuestro tiempo en la cocción que se puede ir a tres horas y media, y el reposo que dejaremos de unas 12 horas como mínimo.

INGREDIENTES:

Para 4 personas.

– Manitas de cerdo ibérico.

Para cocer las manitas:

– 1 cebolla.
-1 zanahoria.
– 1 puerro.
– 2 clavos.
– Tomillo.
– Sal y pimienta.
– Laurel.

Para la salsa.

– 1 cebolla.
– 2 dientes de ajo.
– 150 g de panceta curada.
– 150 ml vino blanco.
– Salsa de tomate al gusto.
– Pasta de pimiento.
– Harina.
– Pimentón de la Vera.
– Aceite de oliva.
– Sal.

PREPARACIÓN:

Lo primero que haremos será pasar una cuchilla de afeitar a las manitas de cerdo, o bien quemarlas con un mechero para quitar los pelitos que pudieran tener. Después las colocamos en un cuenco con agua fría durante 24 horas para que ablanden y suelten la sangre.

A continuación colocamos las manitas en una olla grande con agua fría. Lo ponemos al fuego y tras cuatro minutos, o cuando rompa a hervir, retiramos ese agua sucia.

Limpiamos la olla y la llenamos ya con las manitas y los ingredientes de la cocción arriba expuestos. Rellenamos de agua fría hasta que se cubra todo y ponemos a cocer durante tres horas en cazuela o durante unos cuarenta minutos si lo hacemos en olla express.

Retiramos del fuego y reservamos el agua de cocción.

A continuación deshuesamos las manitas, que quedan mucho más sabrosas, y las dejamos en taquitos de unos 3 centímetros.

Para hacer la salsa picamos la cebolla, los ajos lo salteamos junto con las verduras hasta que queden blanditas. Añadimos la panceta y lo sofreímos todo de nuevo.

Añadimos la harina, removiendo en todo momento, el pimentón y el vino blanco, dejándolo cocer unos tres minutos hasta que evapore el vino.

Ahora es el momento de añadir la pasta de pimiento, la salsa de timate y medio litro de agua para la cocción. Cocinamos durante treinta minutos y servimos junto con las manitas.

Un plato delicioso que se debe servir muy caliente y que se escapa a los sabores normales.