Cuando pensamos en Salamanca, la mayoría de nosotros tenemos en la cabeza una ciudad llena de historia y con un patrimonio cultural enorme que, sin añadir nada más, ya merece una visita.Y es que además de los conocidos monumentos que atraen cada año a numerosos turistas, Salamanca tiene joyas ocultas que merece la pena conocer.
Algunas recomendaciones en Salamanca
Claustro de los Reyes en los Dominicos
Es una auténtica maravilla de piedra y luz. Tiene unos arcos del Renacimiento y otros elementos de estilo gótico que conviven en perfecta armonía. Los ventanales dejar pasar los rayos de sol iluminando la construcción y ofrecen un escenario espectacular. Es una obra del religioso dominico Fray Martín de Santiago y data del siglo XVI.
El casino de Salamanca
Se encuentra muy cerquita de la Plaza Mayor en el Palacio de Figueroa que data del siglo XVI. Es muy interesante visitar el moderno patio que tiene de estilo neorrenacentista. El casino se considera un lugar social y de difusión cultural pero sin actividad de juego. Es un centro emblemático en la vida de los salmantinos. Por ejemplo, antiguamente se hacían aquí tertulias con Miguel de Unamuno.
Plaza del Mercado
Es otra joya de Salamanca que bien merece una visita. La mezcla de estilos de diferentes épocas hace que sea un lugar de gran valor arquitectónico. Además, en ella se encuentra ubicado el mercado central, en un gran edificio construido en el siglo XIX. En su interior se pueden encontrar los mejores productos de la provincia. No hay que olvidar que se trata de una provincia en la que el embutido de calidad es el rey. Allí, por ejemplo, se encuentra la carnicería Carlos Macías, que está especializada en productos ibéricos. Además, preparan unas croquetas de sabores de la tierra que son exquisitas; es difícil pasar por allí y no caer en la tentación.